miércoles, 22 de abril de 2009

Arte con Sonrisas II; Albergue "Mi Casita"

Experiencias Personales
Andrea Herrero El Albergue representa un hogar en el que cada niño, representante y personal obrero forman una gran familia; incluso como voluntaria y por el período de tiempo que duró el proyecto “Arte con Sonrisas II - 2008” me hicieron sentir parte de ella. Es gratificante cuando se entra en la salita de actividades y los niños salen corriendo diciendo: “por fin llegaste!!! ¿Qué vamos a hacer?”. Siempre dicen con sinceridad cuando les gusta una actividad y cuando no, al mismo tiempo que sugieren lo que les gustaría hacer. El tiempo dedicado a visitar, recrear, escuchar y jugar, me permitió conocer, sentir orgullo y admiración por aquellos que, teniendo tan corta edad, llevan con gran fuerza y unas ganas tremendas de vivir, una enfermedad tan difícil como es el cáncer. Es una experiencia que queda en el corazón. Simón Barrios Bravo El abordar a un grupo de niños y jóvenes, que más allá de su condición física, son poseedores de diversas necesidades expresivas y creativas, me permitió reconocer la importancia de una actitud constructiva ante las situaciones difíciles que pudiesen estar presentes en un momento determinado. El dirigirme con intención pedagógica y recreativa a los jóvenes de La Fundación Amigos del Niño con Cáncer precisó una revisión personal sobre la forma de compartir conocimientos con los otros, siendo el ejercicio del arte y la creatividad una manera de sobrellevar situaciones de salud delicada. Sin embargo, esta condición no impidió en ningún momento una respuesta favorable en relación a los talleres y experiencias recreativas desarrolladas durante esta labor comunitaria. La enseñanza fue recíproca, pues mientras les hablábamos entre líneas del arte y de la creatividad, ellos nos hablaban sobre la vida. Lo invalorable de esta experiencia estuvo en aprender todos de ella. Eusebio Rodríguez La experiencia con los niños de la Fundación Mi Casita, fue totalmente enriquecedora, llena de sentimientos encontrados, los cuales nunca pensé vivir; sinceramente el estar rodeado de estos bellos niños llenos de esperanza frente a un mañana incierto, y saber que le estás ofreciendo una ventana mágica a la creatividad, sacándolos de una monótona rutina, mostrándoles el mundo descocido que representa una hoja de papel blanca y unas pocas líneas que esbozan sueños de dinosaurios, bellos castillos, flores y mariposas que ellos, con sus manos de colores, inundan de belleza. Carmen Quintero "Al inicio partí de la idea de que la labor comunitaria debería ser un acto que salga del corazón de cada persona que desee hacerla y no como un requisito obligatorio para obtener un título universitario, pero una vez iniciada mi labor en el Albergue “Mi Casita” ese pensamiento cambió, ya que nosotros solemos ver y pensar que nuestros problemas son más grandes e importantes que el de los demás, pero no es así ya que existen personas que tienen problemas realmente serios, como es el caso de los niños que reciben ayuda de este albergue. Los niños que aquí se hospedan son pequeños que sufren de cáncer y que, a pesar de esto, tienen un inmenso corazón y unas enormes ganas de vivir. La labor comunitaria en el Albergue “Mi Casita” me dejó un aprendizaje de vida, de valor, de amistad y de amor, el cual quiero aplicar con plena conciencia el resto de mi vida.

Del Papel a La Luz II Noviembre 2008-Mayo 2009

El servicio es lo que podemos llevarnos a nuestro encuentro final con Dios. Madre Teresa de Calcuta Prestar el servicio comunitario en la escuela hospitalaria del departamento de oncología en el hospital J.M de los Ríos, ha sido una experiencia que te enfrenta a la realidad. La enfermedad, el sufrimiento, la muerte, y la lucha de seres, que ven truncada su infancia, con el dolor agudo la pérdida de movilidad, de su niñez, del cabello, de algún miembro del cuerpo. Estos son niños especiales, marcados con cicatrices en el cuerpo y el alma. Me siento complacida de prestar el servicio con el equipo de la unidad de oncológica, donde tanto, médicos, padres, enfermeras, maestras y personal de limpieza, están abocados a la labor de ayudar con todos lo recursos a cada niño y adolescente a superar este duro trance en sus vidas. Sin embargo, sientes que nada es suficiente para aplacar ese dolor físico y emocional que produce el cáncer, además el tratamiento tan feroz como lo es la quimioterapia y radioterapia. Te encuentras, que no encuentras respuestas que respondan a esa realidad. Que es tan difícil hablar de esto. La vida no puede ser la misma a partir de ahora, la conciencia está despierta. Danahe Karina Palacios Israel Alejandro
2009